La columna semanal de Gaming+: Consolas que juntan polvo y la decepción de los VGX

Tengo Killzone, Knack... y Killzone... y...

Una semana mas que pasa, las consolas next-gen ya están a la venta, con muy buenos juegos de salida, tanto exclusivos (Xbox One gana por goleada) como multiplataformas, pero fuera de esos juegos de "day one" no se ve nada en el horizonte hasta bien entrado el 2014. Y eso puede no importarle a muchos, los muchos que disfrutan del apartado online de los juegos y que se divertirán jugando Battlefield 4, COD Ghosts y ACIV durante el verano, pero el resto? Los que buscan nuevas experiencias, nuevos exclusivos o tanques que sean imposibles de ver en las consolas viejas tendrán que esperar hasta el próximo año, lo que dejará a sus maquinas juntando polvo y siendo uno de esos tantos aparatos que quedan en la casa prácticamente como decoración.

Y eso hace pensar: realmente era necesario lanzar la next-gen justo en este momento? Tal vez si, tal vez no, porque por un lado las consolas PS3 y Xbox 360 están totalmente desfasadas respecto a poder técnico, pero si el precio del salto es tener unas consolas nuevas de adorno porque los juegos de peso no iban a estar listos en por lo menos un año mas da mucho que hablar. Pero bueno, todas las generaciones comienzan con estos traspiés, con juegos que no demuestran el potencial de la consola, que tienen los mismos conceptos de la anterior generación o que funcionan de una manera inestable. Así que recuerden: siempre tendremos a Lara.

Vengo a decepcionarlos... como todos los años

Y esa frase nos lleva a otro tema: la entrega de los VGX (ex VGA) que a pesar de ser una entrega de premios patética y con un estilo muy infantil es su presentación siempre tiene momentos memorables como Gustavo Santaolalla tocando el main theme de The Last of Us con su charango y anuncios mundiales de los juegos que se vienen para los próximos años, siendo uno de ellos el anuncio de The Last of Us en 2011 (si, siempre The Last of Us es memorable). Aunque los premios siempre nos dejan disconformes.

Este año la cosa cambió, no hubo una presentación tipo show con público (o aplaudidores pagos, como mas te guste llamarlos) sino una especie de programa de entrevistas con distintos trabajadores de la industria que se intercalaban con las entregas de premios y los anuncios mundiales. Y fueron estos anuncios los que nos dejaron fríos en cierto sentido, porque a pesar de ser juegos de empresas de renombre o juegos que realmente pintan bien la cantidad de anuncios fue muy pobre: dos juegos de Telltale, un indie y una conversión del ultimo Tomb Raider para las consolas de nueva generación. Nada mas y nada menos, bastante decepcionante para un evento que prometía muchas novedades y una demostración de que aunque la mona se vista de seda mona se queda, sin duda mucho peor que las entregas de los últimos dos años.

Y así cerramos por hoy, espero que lo lean, opinen y les guste la nota, nos vemos en otras entradas de Gaming+.